Para Martín Javier Hernández Rojas, el líder de la Organización Democrática Independiente de Comitán (ODIC) es urgente modernizar la Central de Abasto “28 de Agosto”, para ofrecerle un mejor servicio a los usuarios y para dignificar el lugar de trabajo de alrededor de 3 mil locatarios.
La modernización de la Central incluye, primero, despejar el lugar para que no haya vendedores ambulantes, quienes deben ser reubicados a una nueva Central de Abasto, en otro lugar, previo acuerdo con ellos, porque, dice, “no se debe caer en la represión y el salvajismo, sino que se debe construir un acuerdo que beneficie a todos”.
Con recursos del gobierno federal y del estado, y con una aportación de los propios locatarios, se puede avanzar despejando los pasillos donde la gente transita y los espacios destinados para efectuar la compraventa, el intercambio entre vendedores y compradores.
Eso generaría, además de comodidad para los visitantes de la central tomatera, mayor seguridad, porque si no hay aglomeración no pueden operar los carteristas ni se dan accidentes o golpes de parte de los carretilleros a quienes realizan ahí la compra del día o de la semana.
Porque no bien se escucha la palabra “ahí va el golpe" cuando el golpe ya está dado, y con esas amargas experiencias, de robo de su dinero y de golpes o lesiones, muchos compradores dejan de ir, se les ahuyenta.
Otro aspecto importante es la electrificación, porque gracias a que no hay condiciones actualmente la Central se cierra a las 6 de la tarde, pues no se puede trabajar sin luz eléctrica, además de que en la oscuridad los delincuentes harían más de las suyas.
“Mucha gente busca los mercados para ir a cenar, y muchos locatarios quisiera trabajar hasta las 10 pero no hay luz, ni seguridad, no hay condiciones, porque a la Central de Abasto los gobiernos municipales no le invierten, al contrario, le quitan, le roban; toman recursos que les dan los locatarios por diversos conceptos y en lugar de reinvertirlos los destina a pachangas, viajes u otros despilfarros; y que no se diga que la administración de la central no les deja dinero; sólo por concepto de cobro de baños reciben alrededor de cien mil pesos al mes, si somos3 mil locatarios y todos pagáramos la raquítica cantidad de 50 pesos al mes ahí tienen 150 mil pesos más, pero no todos pagan 50 pesos, hay quienes pagan hasta 600 pesos, porque manejan bodegas, y además también les cobran a los semifijos, a los ambulantes. Recursos hay, la La gente de la Central de Abasto es gente de trabajo, es autofinaciable, y si eso es poco dinero los locatarios también podemos invertirle, los locatarios debiéramos ser los principales interesados, se me ocurre que les compremos sus locales a los semifijos y que se invierta en el estacionamiento, del cual padecemos, porque en la central los locatarios utilizan los estacionamientos, cuando en realidad debieran ser exclusivamente para quienes llegan a comprar, el locatario puede utilizarlo para descargar, pero con horarios establecidos, no quedarse ahí permanentemente, impidiendo que los clientes puedan encontrar un lugar donde dejar su unidad para luego ir a hacer sus compras y regresar con la calma y comodidad necesaria. A 80 metros está Aurrerá con un gran estacionamiento, sin ambulantes, con amplios espacios donde la gente transita con toda calma, sin miedo a ser esquilmado por carteristas ni a recibir algún golpe por carretilleros. Pero hay que invertirle, que el ayuntamiento no se lleve a otro lado el dinero de la central, que lo reinvierta. No se vale que a los pobres les quiten, y a los ricos les den, como ocurrió cuando le dieron el permiso para que viniera Aurrerá; en esa ocasión el Servicio Estatal de Empleo les capacitó a sus trabajadores, pagando el gobierno el curso que les impartieron en Tabasco, ¿por qué al que tiene mucho el gobierno le da más y al jodido o al que no tiene poco o no tiene nada en lugar de darles les quita o sólo hace como que les da?”, explica el líder de la ODIC.
El gobierno, en estos casos, alega la generación de empleos como principales beneficios de la inversión que realiza y las facilidades que otorga a estas grandes cadenas; sin embargo, con ello parece despreciar lo que evidentemente sucede en la Central de Abasto, que es generadora de empleos y que permite comercializar a productores de los municipios de Comitán, La Trinitaria, Las Rosas, Tzimol, La Independencia y Las Margaritas, y que inclusive atrae a compradores de estos y otros municipios, por lo tanto revitaliza la economía. ¿Qué sucedería si de pronto desapareciera la Central de Abasto? ¿A dónde se irían a trabajar los 3 mil locatarios? ¿Cuánto bajarían los ingresos de los transportistas locales y foráneos?
Si el gobierno municipal no le invierte a la Central, que por lo menos no le quite, y que sí reinvierta lo que le aporta este centro de trabajo y comercialización.
Si sólo en dos conceptos se alcanza más de 3 millones de pesos al año, y los 3 mil locatarios aportaran una módica cantidad de mil pesos cada uno se reúnen otros 3 millones de pesos. Con cualquier programa federal con un esquema de financiamiento peso a peso se podrían invertir 12 millones de pesos para su modernización.
¿Y no puede el ayuntamiento municipal gestionar un crédito a 5 años para que la central de abastos lo pague?
Cierto, el ayuntamiento gasta en pago de personal, energía eléctrica y algunos insumos para sanitarios y trabajos de limpia, pero es menor el gasto que realiza a lo que la Central devuelve en recursos, y aún en ese renglón, dice el líder social, hay más personal en la administración de la Central de Abastos de lo que se requiere y por ahí se puede ahorrar dinero, pero más se ahorra eliminando la corrupción y poniéndole un poquito de voluntad.
No hay comentarios:
Publicar un comentario