miércoles, 27 de febrero de 2008

Tres grupos disputan el PRI comiteco


En Comitán también se está disputando el poder en el PRI.

Varios grupos están en la pelea, en busca de colocarse y colocar a los suyos.

Están en esta disputa tres grupos políticos, que a continuación se describen:

LOS REBELDES

En el primer grupo está el grupo de Jorge Constantino Kanter y Matías Castellanos, quienes no han renunciado a la disputa de esa posición de poder, desde donde podrían lanzar a un candidato a la diputación federal, presidencia municipal o diputación local.

Tienen varios gallitos de pelea, unos con espolones y otros con barba tupida.

LA MAFIA SICILIANA

La Mafia Siciliana la integran los “malososos”, los que han estado en el poder sólo para hacer de las suyas, para enriquecerse, servirse con la cuchara grande, olvidándose de servirle al pueblo.

Aquí veo moviéndose a Roberto Fuentes Domínguez, Mario Carlos Culebro Velasco, Fernando Zea Vázquez, entre otros, quienes ya tuvieron su oportunidad y no hicieron nada ni por Comitán ni por la región fronteriza.

Los que de este grupo alcanzaron la diputación federal encajan bien en aquella definición de haber sido “un robo a la nación”.

LOS FRUSTRADOS Y ARDIDOS

El otro grupo, el de Los Frustrados y Ardidos, lo encabeza el ex diputado local y varias veces ex candidato derrotado, Víctor Hugo Ruiz Guillén, quien, además de sus facultades mentales, ha perdido mucho pelo en cada contienda electoral pero, como además pierde, entonces tiene muy visible las derrotas de la frente hacia atrás.

Ahí está también, por supuesto, Marco Antonio Morales Liévano, eterno candidato a todo lo que sea candidatura.

Sólo una vez le ha atinado Víctor Hugo, cuando buscó la diputación por el PRI y alguien le "echó" la mano para que alcanzara esa candidatura, pero aún en esa ocasión había probado el sabor de la derrota, al ir a pedir que le dieran oportunidad de abanderar al PRD-PT para la diputación, saliendo con la cola entre las patas.

Por eso regresó al PRI, donde consiguió ser candidato, y como en esa etapa cualquier candidato priista ganaba, sin importar su perfil, pues obtuvo la victoria, más del partido que de él.

Ya siendo diputado buscó ser candidato a la presidencia municipal por el PRI, pero fue gachamente derrotado y debió tragar su ardor y frustración, pues le ganó nada más y nada menos que Jorge Constantino Kanter.

En esa ocasión se le creció la frente hacia atrás, casi lo dejan sin cabello.

Tres años después volvió a intentarlo, consiguiendo una pírrica victoria interna frente a Rafael Morales Serrano, sólo para ser vilmente derrotado por Eduardo Ramírez Aguilar, por soberbia goliza. Desde entonces tiene mucha cara que lavar, casi el doble en relación a la de hace tres años.

Esta derrota es la última, pero del pasado, porque en el futuro mediato vendrán muchas más, según parece.

Por eso, mejor que no le busque, y menos que ande tratando de desacreditar en los medios de comunicación a los funcionarios del ayuntamiento municipal de Comitán, pues volverá a morder el polvo, porque ya sabiendo de quién llega la crítica, nadie le hará caso y caerá por su propio peso.

Por cierto, seguiremos abundando de este último grupo y de su líder, en próximas entregas.





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