El Presidente Municipal de Bella Vista, Aníbal Roblero, coronó este 12 de abril a una “reina espuria”.
Si el edil serrano no sabe qué significa espuria, ahí le van estos adjetivos que los habitantes de su municipio le han puesto a lo que fue el proceso de elección de la reina: “ilegítimo”, “falsificado”, “mentiroso”, “engañabobos”, “burdo”, “grosero”, “tosco”, “rústico”, “gregario”, “medieval”, y muchos otros más. Claro, hay algunos adjetivos que no son “escribibles” o “pronunciables”.
La razón de esto es que el presidente impuso a
Bueno, a él se la impuso su mujer, Lisbeth Roblero Paniagua.
No se sabe qué habrá respondido a la orden que le dio su mujer, pero obviamente dio el “Sí”. Quizá agregó: “Ya veremos cómo la hacemos reina, pero que la hacemos, la hacemos reina, si no para qué soy el presidente”.
Ese día se decidió la historia de la elección de
Sin embargo, cuando la población supo quiénes eran las candidatas, todo mundo se fue con la finta: va a ganar fulana de tal, o mengana, refiriéndose a dos chicas muy bellas, una del ejido Las Chicharras y otra del ejido Emiliano Zapata. Pero a la de Las Chicharras no la dejaron pasar, porque de haberlo hecho habría ganado con facilidad, aunque es igualmente competitiva Ana Lizeth Santizo, de singular belleza, también favorita, esta última del ejido Zapata.
De repente comenzó a correr el chisme: que el reinado ya tenía nombre y apellidos, y que el jurado calificador ya tenía línea: votar por Ariadna Roblero Velázquez, la hija del “Primer Aviador”, la sobrina de
Ah, burro, así, con tanta influencia, pues cualquiera gana.
Así ganó también, hace más de 50 años, María Salvatierra, hija del alcalde de Atiztingo, Carlos Salvatierra; corrían los años cincuentas, pues la película que lo relata se filmó en 1952.
Pedro Infante y Antonio Badú, los Hijos de María Morales, comadre del presidente municipal, protagonizaron una película que dejaba ver cómo se elegían a las reinas por esos años. Igual, igualito que hicieron en Bella Vista, en pleno 2009, apenas hace unos cuantos días.
Ese día, hace más de medio siglo, el padre de la “interfeuta”, o sea, el Presidente Carlos Salvatierra, calificó a la elección de su hija como una elección “popular y espontánea, porque todos los votos que ella tuvo… ninguno fue en contra de ella”… No tuvo con quién competir, pues. Pero igual si hubiera tenido, con una orden y buenos billetes cualquier jurado tuerce la mano y cambia el sentido de su voto.
Ah, en esa película, también se escuchó la voz de un poeta que repitió, decenas de veces, aquella famosa frase: Yo soy admirador de la blancura…
Yo soy admirador de la blancura… Yo soy admirador de la blancura…
Sus versos eran estos:
“Yo soy admirador de la blancura, sí, de la blancura que corona sin mancha en los volcanes, que es plumaje en el cuerpo de las garzas y nostalgia de turbios gavilanes
“Yo soy admirador de la blancura, sí, de la blancura que se anida en el fondo de las almas, que es pureza ideal en nuestra reina, y caricia de brisa entre las palmas.
“A ti, reina sin par, mi voz te canta ensalzando de tu alma la blancura, tu porte y tu belleza deslumbrante…”
Pero era tanto el desmadre ocasionado por la imposición de la reina, y de su amiga como princesa, que todo mundo se carcajeaba y se burlaba del alcalde.
Los hijos de María Morales apagaron la luz, pero seguía escuchándose la frase… Yo soy admirador de la blancura… Yo soy admirador de la blancura… Yo soy admirador de la blancura…
Los hijos de María Morales inclusive se robaron montadas en dos caballos a la reina y a la princesa coronada por el presidente municipal, pero el poeta seguía repitiendo: Yo soy admirador de la blancura… Yo soy admirador de la blancura… Yo soy admirador de la blancura…
Al señor Aníbal Roblero, alcalde de Atiztingo, perdón, presidente municipal de Bella Vista, le hizo falta un poeta panzòn y de bigote que dijera también, hasta el cansancio, Yo soy admirador de la blancura… Yo soy admirador de la blancura…
No quiero decir que la chica impuesta como reina, la señorita María Salvatierra, perdón, Ariadna Roblero Velázquez, la hija del “Primer Aviador”, la sobrina de
Pero, además, hubo un factor que tampoco se tomó en cuenta: la inteligencia de las chicas, manifiesta en su facilidad de palabra.
María Salvatierra, perdón, Ariadna Roblero Velázquez, la hija del “Primer Aviador”, la sobrina de
¿Cómo hablar contra la drogadicción si ella no la combate ni en su propia persona?
Pero, claro, es la hija del “Primer Aviador”, la sobrina de
…Yo soy admirador de la blancura… Yo soy admirador de la blancura… Yo soy admirador de la blancura…
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