No quisiera estar en los zapatos del maestro de la escuela "Belisario Domínguez Palencia", de la Pilita Seca, ciudad de Comitán.
Si es verdad la acusación que pesa en su contra, debiera enterrar su cara para que nadie lo mire, sin que tenga que desviar, a su vez, la mirada.
Si es mentira, de todos modos qué broncas: tener qué justificar y hacer el desmentido.
David Tavernier tiene el audio, la voz femenina a punto de estallar del coraje, a pesar de que su hija no ha sido "tocada" por el profe.
Si quiere escucharlo, profe, ahí está disponible, aunque, aclaro, no le diremos de quién es la voz.
Lo invitamos al Fronterizo del Sur, sirve que le tomemos su foto.
Por cierto, ¿por qué no se presentó a trabajar el viernes? ¿Alguien le dijo que había un reportero buscándolo y decidió no dar la cara?
No te escondas, compa. Enfrenta a David Tavernier. No tiene pistola ni piedras ni palos ni nada con qué lastimarte, solamente una grabadora para que ejerzas tu derecho de réplica, y una cámara fotográfica para que levantes la mirada al Sol.
Tienes la palabra.
Ahora bien, parece que el Director de la Escuela trata de protegerte, compa.
Si es así, ¿de qué te preocupas?
Una de dos: o es tu cómplice y sigue tus mismas prácticas, o de verdad eres inocente.
También tu Supervisor, José Ángel Vives, parece estar de tu lado. ¿Acaso lo acompañas a tomar trago en aquel cuartucho de madera que está junto a la Supervisoría?
Quizá sí, y entonces es tu cómplice y sigue tus mismas prácticas, o de verdad eres inocente.
Yo no sé si la Jefa de Sector va a apoyar al profe de la Pilita Seca.
Si lo hace por compañerismo, importándole un bledo la cuestión de género y el derecho de las niñas a una vida emocional sana, dará de qué hablar.
Si no lo hace, también.
Pero seguramente los líderes sindicales sí van a apoyar al maestro, haciendo a un lado el apoyo que debieran recibir las niñas afectadas.
Ya veremos a la gente de Galíndez desgarrándose las vestiduras y acusando al periódico El Fronterizo del Sur de ser amarillista.
Pero, conste, el reportero recibió la denuncia, y la publicó. David Morales, a altas horas de la noche, tuvo que ir a tomar la fotografía de la escuela.
Pero conste también que el reportero no se quedó con la versión de la madre de familia, fue a buscar al maestro acusado para que se defendiera, pero éste no lo hizo, al contrario, se escondió. Algo tiene que esconder.
Además, el profesor denunciado es influyente, tiene mucho dinero y amigos billetudos o en el poder.
Entonces no veo que deba preocuparse mucho, con dinero baila el perro, y también las autoridades vinculadas a la impartición de justicia.
Que suelte la paga en el Ministerio Público, en el Juzgado, etc.
Porque en El Fronterizo del Sur su dinero no tiene ningún valor.
No hay comentarios:
Publicar un comentario