“Oye para el 21 de marzo voy a invitar a todos los cuates de prensa a un desayuno, voy a presentar un proyecto que se llama México Grandioso”, dice mi tío Mario Escobar Gálvez, otro calenturiento.
“Se trata de recordar que somos herederos de grandes civilizaciones, de que no lo olvidemos y de que con un cambio de actitud, podremos crear una nueva civilización”, se avienta ese compadre, que siempre ha destacado por su brillantez intelectual. Tenía que ser mi familia.
“Le pediremos a la gente que aporte un diezmo, pero no en dinero, sino en actitud; al ladrón que roba diez casas, le pediremos que robe 8, a la gente que no es ladrona , que done tiempo porque siempre hay una tía olvidada, un primo necesitado , alguien que sólo quiere ser escuchado, sin un peso”, insiste este we, como si no supiera que pedir no empobrece, que dar es lo que aniquila.
“Podremos colocarnos en la fila de los grandes, del México de Vasconcelos, de Alfonso Reyes, de Antonio Caso, de Revueltas, del gran Disraelí Ángel Cifuentes, de los grandes”. Ahora yo, si yo todavía estoy vivito y coleando por qué me pone en esa lista, ahí puro muerto hay.
“Dentro de este proyecto hay un sub programa que se llama México Campeón del Mundo. ¿Quién no quiere que México sea campeón del mundo en el fútbol?” Chale, con trabajos la Sub 20 empató con Costa Rica, siendo México local, y ya los pinches de los estadounidenses demostraron y acreditaron que son nuestro padre en fútbol.
“Si nos convertimos en un país con otra actitud, los jugadores tendrán que responderle al país, los haremos campeones, entonces a un niño le dirás que de él depe
nde que México sea campeón”, me explica este we, seguramente también estudió para cura el compadre este.
“La idea es darla a conocer a puros amigos, y que ellos lo hagan con puros amigos, no conocidos, ni compañeros de trabajo, no, puros amigos, que crean en ti, como supongo que tu crees en mi”. Sí, señor, creo en Mario Escobar todo poderoso, donde quiera anda metido, tiene la cualidad de la omnipresencia, en su IMER y en Las Margaritas, en un baile y en el coche, etc.
“Este proyecto nace en el sur, en Chiapas, lo hemos trabajado con Godofredo Rodríguez, de Bella vista, es una utopía que nace en "las montañas del sureste mexicano" como dice Marcos”, me explica.
Saber, pero si lo dice Mario Escobar Gálvez es digno de crédito. Es un tipo positivo, no sólo inteligente. Es un tío visionario, no sólo exitoso empresario y funcionario de la comunicación.
Es una persona seria, nomás que mis calenturas no me permiten dejar hablar a la gente como debe ser.
Habrás de disculpar, tío.
“Le pediremos a la gente que aporte un diezmo, pero no en dinero, sino en actitud; al ladrón que roba diez casas, le pediremos que robe 8, a la gente que no es ladrona , que done tiempo porque siempre hay una tía olvidada, un primo necesitado , alguien que sólo quiere ser escuchado, sin un peso”, insiste este we, como si no supiera que pedir no empobrece, que dar es lo que aniquila.
“Podremos colocarnos en la fila de los grandes, del México de Vasconcelos, de Alfonso Reyes, de Antonio Caso, de Revueltas, del gran Disraelí Ángel Cifuentes, de los grandes”. Ahora yo, si yo todavía estoy vivito y coleando por qué me pone en esa lista, ahí puro muerto hay.
“Dentro de este proyecto hay un sub programa que se llama México Campeón del Mundo. ¿Quién no quiere que México sea campeón del mundo en el fútbol?” Chale, con trabajos la Sub 20 empató con Costa Rica, siendo México local, y ya los pinches de los estadounidenses demostraron y acreditaron que son nuestro padre en fútbol.
“Si nos convertimos en un país con otra actitud, los jugadores tendrán que responderle al país, los haremos campeones, entonces a un niño le dirás que de él depe
nde que México sea campeón”, me explica este we, seguramente también estudió para cura el compadre este.“La idea es darla a conocer a puros amigos, y que ellos lo hagan con puros amigos, no conocidos, ni compañeros de trabajo, no, puros amigos, que crean en ti, como supongo que tu crees en mi”. Sí, señor, creo en Mario Escobar todo poderoso, donde quiera anda metido, tiene la cualidad de la omnipresencia, en su IMER y en Las Margaritas, en un baile y en el coche, etc.
“Este proyecto nace en el sur, en Chiapas, lo hemos trabajado con Godofredo Rodríguez, de Bella vista, es una utopía que nace en "las montañas del sureste mexicano" como dice Marcos”, me explica.
Saber, pero si lo dice Mario Escobar Gálvez es digno de crédito. Es un tipo positivo, no sólo inteligente. Es un tío visionario, no sólo exitoso empresario y funcionario de la comunicación.
Es una persona seria, nomás que mis calenturas no me permiten dejar hablar a la gente como debe ser.
Habrás de disculpar, tío.
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