Irán Mérida responde con represión al pueblo de comalapa

Gonzalo Pérez

Frontera Comalapa, Chiapas.- Aprovechando sus “contactos” en la Policía Judicial, el alcalde comalapense, Irán Guanerges Mérida Matamoros, logró que fuera detenido uno de los dirigentes del movimiento social en su contra: Enrique Robledo Molina.

Como si fuera un delincuente peligroso, proscrito de la ley, la tarde del pasado viernes, cuatro sujetos no identificados, provistos y dotados con armas cortas, con toda la saña y encono secuestraron al Comalapense Enrique Roblero Molina, arrebatándolo de una comisión de este municipio Fronterizo, para hayar una salida a la ingobernabilidad que vive este municipio.

Los integrantes de la comisión desde temprana hora acudieron a la ciudad capital, para entrevistarse con los diputados de la cámara local y funcionarios de la Secretaría de Gobierno, topándose con un no rotundo de los legisladores priistas a la exigencia del desafuero del edil Iram Mérida Matamoros.

Justo en el momentos en que se encontraba abordando un camión, junto a sus compañeros, a un lado del palacio de Gobierno en Tuxtla Gutiérrez, para trasladarse a Frontera Comalapa, relata Molina, fue sorprendido por la espalda por los sujetos, quienes lo patearon en los pies, lo tomaron de la cintura y lo llevaron a rastras hacia la unidad.

Ya en su poder, lo tundieran y apalearon en toda su anatomía para aventarlo hacia la parte de arriba de la góndola de la unidad.

Aquí lo esposaron, lo amordazaron y taparon su rostro con un trapo color negro; un fotógrafo y un dirigente más, intentaron quitarlo y defenderlo, pero fue inútil, pues nada más lograron que los encañonaran de frente, relatan los testigos.

Relata Molina, que después de recibir los golpes fue tirado boca abajo con las botas de los agentes en su espalda, fue paseado por más de dos horas por toda la ciudad de Tuxtla Gutiérrez, sin saber la razón de su secuestro; “sólo escuchaba las claves que los agentes se intercambiaban y no podía ver nada, pues estaba amordazado con la cara cubierta; ya más tarde fue tirado en una de las calles de Tuxtla. Después pidió poyo a un ciudadano quien le prestó para el taxi y así reunirse con sus compañeros de lucha

Al momento de su secuestro, sus compañeros de lucha reaccionaron rápidamente para buscar la forma de agilizar su búsqueda, afortunadamente en ese momento, pasaba sobre la avenida central de la capital, el legislador de esta Zona Sierra, Rafael González Chamblati, quien ya se había entrevistado con ellos momentos antes sin que se lograran acuerdos sustentables.

Aquí inmovilizaron su unidad para pedirle ayuda. El legislador de inmediatamente se comunicó vía teléfono celular, con Asbel Ochoa, subsecretario de Operación Regional del Gobierno del Estado, para peguntar sobre el paradero de Enrique Molina y que si estaba detenido, que se hiciera lo posible para liberarlo, pues hay un acuerdo de no actuar penalmente contra nadie, aun viniera la recomendación del alcalde Comalapense

Para ello, ya habían pedido la ayuda de un agente de la policía sectorial, para intensificar su búsqueda, por lo que se taponaron las entradas y salidas de la capital del estado.

Más tarde, a bordo de un taxi, regresó Enrique Robledo Molina, quien se reportó con su grupo, para informarles de lo que había pasado, adelantando que interpondrá una querella ministerial contra Irán Mérida Matamoros, y los que resulten responsables, por el delito de secuestro, pues la lucha es pacífica, y que esta agresión es contra el pueblo de Comalapa, no contra él y que las cosas están tomando un rumbo álgido, por lo que convocó al pueblo Comalapense para sumarse a la lucha pacífica contra este régimen municipal.