El Presidente Municipal de Las Rosas ya no ve lo duro, sino lo tupido, y ahora le está pidiendo al gobernador del estado que ya interceda por él, y que de inmediato aplique la fuerza pública para desalojar a los inconformes que mantienen tomada la presidencia municipal de ese lugar.
José Domingo Argüello Ruiz, convocó a rueda de prensa en las instalaciones de la Delegación de Gobierno de Comitán, para exigir, ya, la aplicación del estado de derecho, pues, dijo, "no es posible que sigan detenidos los trabajos que el ayuntamiento quiere realizar a favor del pueblo".
Sin embargo, cuando una reportera le preguntó si la aplicación del estado de derecho que solicitaba al gobierno del estado significaba que ya se realizara un operativo policíaco para desalojar a los inconformes, no supo responder, pues sólo atinó a decir "eso le toca
decidir a la administración estatal", como para lavarse las manos.
El alcalde dijo que no entendía el por qué de la cerrazón de la parte inconforme, que a la fecha lleva ya un mes con la toma de palacio municipal de Las Rosas, pero él mismo dio la respuesta, pues tácitamente reconoció que su posición es inflexible con la negativa rotunda a prácticamente todas las demandas de los alzados.
Por ejemplo, cuando comenzó a señalar que ya él había accedido a las peticiones de los comisariados que sostienen la toma del palacio municipal, enlistó únicamente una respuesta afirmativa: la de realizar las reuniones de cabildo de manera pública.
Uno de los reporteros, sin embargo, le recordó al alcalde que esa no era ninguna concesión de su administración, pues la ley orgánica municipal así lo mandata, por lo que el edil se puso nervioso y no supo qué decir, más que balbuceos incoherentes.
De inmediato le recordaron a Argüello Ruiz que además de su propia salida, los plantonistas exigen la salida de seis funcionarios, muy cercanos a él, la mayoría por antecedentes negros en la
administración.
Su respuesta, profusa, fue que sus colaboradores son los mejores de Pinola, que no hay quién pueda ofrecer mejores resultados que el Director de Obras Públicas acusado de varios, no uno, sino varios procesos de fraude.
"Eso ya fue aclarado", respondió Argüello cuando le recordaron del fraude Cosmotel, donde está implicado el también ex director de obras en Socoltenango, quien inclusive fue calificado ya como un "corrupto profesional", pues Rolando Caballero ha tenido que ir respondiendo a demandas ante el ministerio público por su mal proceder.
Por cierto, nadie dijo nada del funcionario que también fue acusado de un cuantioso robo a la corona, y que el edil de Pinola sostiene como Secretario Municipal, aunque el edil se llenó de alabanzas en su favor, quemándole inciensos, a pesar de su mala fama pública, según denuncias de los inconformes.
Nadie cuestionó también el motivo por el que el comandante de la policía municipal siguiera en el puesto, a pesar de ser un promotor de la prostitución y tener en su haber un intento de homicidio, pues baleó a un anciano, según lo han reiterado los opositores del edil.
Juan Colorado, por cierto, ha de disfrutar de la pleitesía que le rinde su jefe. Y nadie cuestionó nada porque el alcalde, en efecto, se desbocó en adulaciones, diciendo que no hay otro que le llegue a los talones en cuanto a capacidad de respuestas a favor de la seguridad de
los pinoltecos.
Después de escuchar su perorata, se le pidió que respondiera entonces si su discurso significaba un no rotundo a cesar a los seis funcionarios cuestionados, ante lo cual tampoco supo hilvanar una
respuesta coherente, y trató de confundir a los reporteros, diciendo que eso estaba en manos de los funcionarios estatales, pero haciendo el máximo esfuerzo para que tampoco pareciera que le avienta la papa caliente a la administración sabinista.
Así que, por lo pronto, Juan Sabines ya escuchó la petición del presidente municipal constitucional de Las Rosas, José Domingo Argúello Ruiz, para que en las próximas horas aplique la fuerza pública en contra de Chemingo Meneses, Hortensia Gamboa, la regidora Karla Gamboa, los otros regidores que acompañan al movimiento y la totalidad de comisariados ejidales plantonistas.
Lo que parece más seguro es que el mandatario estatal lo mande por un tubo y le diga que ya ponga fin al conflicto que su necedad necia ha desencadenado en Pinola.
Argüello Ruiz dice que son los inconformes los tercos, que él es un santo, que sus colaboradores son unos ángeles del cielo y que su administración es la mejor, pues en los próximos días se iniciará con la construcción del hospital pinolteco, en lo que parece ser una mentira más, aunque piadosa.
"Nosotros queremos resolver esto, hoy estuvimos esperándolo para que se diera un proceso de diálogo pero ellos no se presentaron, en una cita anterior nosotros no nos presentamos porque creímos que no estaban dadas las condiciones de seguridad para nosotros ni para ellos".
Esta es la primera vez que el alcalde da la cara públicamente, aunque le reprochó al subsecretario de gobierno de la región fronteriza que no le haya mandado poner unos spot de radio para desmentir alguna situación de la ingobernabilidad de Pinola, como si Paco Escobar fuera su cargamaletas. ¿Lo será?
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